jueves, 24 de marzo de 2016

Semana Santa

Parece que fue ayer cuando estábamos celebrando la navidad y el día de los enamorados y sin comerlo ni beberlo nos hemos plantado en el jueves santo.

Hablando de comer y beber, para mí la semana santa tiene dos cosas: los días de fiesta y las comidas típicas de estos días.

Que me perdonen los católicos apostólicos y romanos, pero yo es que eso de ir de procesión en procesión es que no lo veo y que conste que mi novia me llevó un año a ver el Medinaceli, con lo cual yo ya he cumplido con ir a una procesión una vez en la vida y ya puedo opinar, ¡ea! para que luego no me digan.

Que conste que a mí me parece muy bien todo ese meneo y jolgorio y despliegue de amor y pasión y fe y todos esos sentimientos.


Lo que yo puedo decir es simplemente que no van conmigo, a mí lo único que me provoca emoción y admiración es la talla de la virgen o el cristo de turno como mera amante del arte que soy.

De todos modos que conste que a mí no me parece mal que salgan las procesiones, la religión es una cosa muy personal y creo que hay que respetarla como a todo porque si los laicos no lo hiciéramos, seríamos justamente como ellos que no respetan por ejemplo la homosexualidad y yo no quiero ser de esos. 


Volviendo a la comida...  con la antigua tradición y prohibición a la vez de no comer carne en estas fechas, se empezaron a preparar platos tan ricos como el bacalao en salsa, o en buñuelos o tortillitas, el potaje de vigilia con garbanzos, bacalao y espinacas (aunque también sé que hay quien lo hace con acelgas), sopas de ajo, patatas viudas y varias comidas más dependiendo de las zonas.


Después tenemos mi parte favorita, los dulces para la ocasión. La torrija es la reina de la fiesta, con azúcar, miel, vino etc y las versiones más modernas con chocolate o crema pastelera.


En algunas zonas se comen pestillos o roscos con azúcar, monas de pascua con el huevo duro y otro clasicazo, al menos en mi familia, como es el arroz con leche que tampoco puede faltar.

Así que seáis religiosos o no lo seáis, os gusten las torrijas y el bacalao o no os gusten, deseo que descanséis un poco si podéis estos días de fiesta, enseñad a vuestros niños los platos típicos y llevadlos aunque sea a ver una procesión para que sepan lo que es y puedan decidir y opinar por ellos mismos y de paso ver las preciosas tallas que son verdaderas obras de arte. Feliz semana santa a todos.

2 comentarios:

  1. Holaaa!
    Ya estoy por aquí, precisamente poniéndome al día post Semana Santa. Yo tampoco soy de procesiones etc etc, solo me interesan los 5 días libres, sinceramente. jajajajaj.
    Muchísimas gracias por el comentario de Twitter del otro día, me hizo una ilusión bárbara.
    Besotes a las dos

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  2. Sí jaja para mí lo mejor son las fiestas y la excusa de hacer arroz con leche y torrijas y esas cosas; que ya ves tú, puedes hacerlas en agosto, pero bueno en agosto ya tendré la excusa de comer helados jaja. me alegra que estés de vuelta. un abrazo

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